La obsolescencia programada, que contempla que un dispositivo no sea funcional después de cierto tiempo, no es reconocida por los fabricantes. Los consumidores, se ven afectados por este sistema de planeación.
¿Has escuchado el término "obsolescencia programada"? ¿Ha pasado que justo cuando se termina la garantía de tu computadora, algo le falla? ¿Te arrepientes de haber comprado la primera generación del iPad porque seis meses después salió la segunda sólo con algunos "cambios"?
Aunque los fabricantes de tecnología no lo reconocen como tal, existe el término de obsolescencia "planeada" o "programada", o lo que es lo mismo, hacer que un aparato electrónico "caduque" luego de cierto tiempo, provocando que el usuario adquiera la nueva versión, lo que genera una cadena de consumo que se antoja eterna.
Para Andrea Cruz, de 20 años y usuaria de computadoras, al haber adquirido una iMac G5, que justo a los 2 años sufrió un desperfecto crónico y sin arreglo en el monitor, la tiene convencida de que todo fue un truco para hacer que compre una, por lo menos, cada año.
Ella tuvo que deshacerse del equipo y comprar uno nuevo, pero ya está en su mente la idea de que no le va a durar más de dos años.
Lo más seguro es que Apple no va a aceptar que "planeó" que el equipo de Andrea fallara en determinado periodo de tiempo.
La obsolescencia planeada es un política que involucra el diseño para la planeación de un producto para que tenga una vida útil limitada, de tal manera que se vuelva obsoleto o no funciona luego de un tiempo.
Las ventajas, al final de cuentas, son casi todas para el fabricante, aunque si se es optimista podría tener una el usuario: cuenta con la última tecnología todo el tiempo.
En contexto
El término obsolescencia planeada no es nada nuevo.
De acuerdo con algunos analistas, esta estrategia está basada en el hecho de que se genera un volumen de ventas a largo plazo reduciendo el tiempo entre compras de un mismo tipo de producto. Los fabricantes creen que los ingresos por ventas que se crean compensan los costos adicionales de investigación y desarrollo de producto.
Sin embargo, esto puede representar un riesgo, ya que los consumidores podrían decidirse a comprar un producto de otros fabricantes al ver que tienen que cambiar sus equipos cada determinado tiempo.
De acuerdo con Brian Clark Howard, del blog The Daily Green, lo más molesto de la obsolescencia planeada son las baterías propietarias, en especial las de ion-litio que se integran en muchos reproductores MP3, computadoras portátiles o cámaras digitales.
"En muchos casos la batería no se puede sacar fácilmente por el consumidor, lo que los obliga a requerir un servicio más caro cuando se consume completamente".
Al final, esto obliga a buscar desechar el equipo antes que adquirir otra batería, la cual generalmente es cara y está fabricada para funcionar luego de un determinado número de ciclos de uso, para luego dejar de funcionar.
Maquinaria de planeación
Es una realidad, el avance tecnológico no se detiene, así que el tener la última computadora puede asegurar el uso de componentes y accesorios con desempeño mejorado.
Serge Latouche, en el documental de Televisión Española, aboga por una reducción del consumo y la producción para promover otra formas de riqueza, como el conocimiento.
Y mientras la cadena alimenticia de los fabricantes de tecnología se beneficia, el perjuicio va para los resumideros electrónicos.
"Ciclo de vida, no obsolescencia"
Más que un concepto tan contundente como el de "obsolescencia", fabricantes de hardware y software prefieren usar términos como ciclos o tiempos de vida evolución tecnológica.
En el caso del software, por lo general va muy amarrado al hardware que sirve de base para su desempeño; por el lado de los periféricos, se contemplan tiempos de vida útil y se ofrecen alternativas para actualizarse a tecnología de mayor desempeño.
"HP, dependiendo del mercado al que va dirigido, si tienen identificado el tiempo de vida útil de las impresoras", explica Elizabeth Romero.
La utilidad de equipos de impresión para Pequeñas y Medianas empresas es de 2 años, y los que están dirigidos al hogar.
"Tanto a los usuarios finales como a los corporativos, HP les recomienda que cuando tengan un equipo obsoleto, aprovechen las diferencias promociones que se lanzan a lo largo del año, con el fin de actualizar su periféricos, ya sea con precios muy atractivos o promociones en las que HP recibe la impresora actual y da dinero a cambio para la compra de la nueva impresora.
Microsoft prefiere no hablar de obsolescencia, ni planeada ni de otro tipo.
"Nosotros no hablamos de obsolescencia planeada o programada, hablamos de evolución tecnológica y ciclos de vida de la tecnología".
"Microsoft tiene un compromiso con sus usuarios de innovar cada tres o cuatro años. Más que obsolescencia, en el caso de software, sobre la capa anterior se construye una nueva y se asegura interoperabilidad entre una versión y otra".
Conforme el ecosistema tecnológico avance (hardware, software, periféricos, redes), los ciclos de vida se acortan, observa.
Microsoft invierte 9 mil millones de dólares en investigación y desarrollo cada año.
"En todos los dispositivos, si se está al día con las aplicaciones y actualizaciones, lo más seguro es que se tenga una experiencia transparente en el uso de la tecnología", finaliza.
Infraestructura sólida
En el caso de los usuarios empresariales, el escenario pinta distinta.
La infraestructura, incluyendo sistemas de conectividad y seguridad, debe estar disponible para soportar los últimos desarrollos , por lo que no se puede dar por sentado que una tecnología obsoleta de todas formas resuelve las necesidades.
Andrés Marcías, gerente de Mercadotecnia en Anixter México, dice que las computadoras cada vez son más rápidas, por lo mismo usuarios y proveedores se deben preocupar de que el cableado estructurado esté dándoles el rendimiento debido a los equipos.
"Si no tenemos el adecuado, entonces podemos empezar a tener obsolescencias", "Si no existe una preocupación por la infraestructura, de nada sirve tener las computadoras más nuevas".
Es necesario cumplir con todos los requerimientos, que todo esté al mismo nivel y no haya elementos obsoletos que provoquen bajas o paros en el desempeño.
¿Diseñados para fallar?
De acuerdo con The Daily Green blog especializado en asuntos medioambientalistas de Hearst Communications, hay varios productos que están diseñados para fallar luego de un tiempo, entre ellos están cinco relacionados con tecnología.
Cartuchos de tinta. Algunos con chips que los deshabilitan cuando un color llega a cierto nivel, aunque tenga suficiente tinta para seguir con las impresiones.
Videojuegos. Salvo algunas excepciones, la mayoría de los sistemas de videojuegos ha sido diseñado para evitar una compatibilidad hacia atrás.
Software. Aplicaciones y plataformas operativas requieren de computadoras más rápidas, si el usuario quiere las últimas versiones de software generalmente requerirá de equipos más poderosos. Además, casi siempre es obligatorio renunciar a viejas versiones cuando el desarrollador del software elimina el soporte para ellas.
Automóviles. Partes y accesorios que ya no se fabrican para modelos antiguos, lo que hace difícil la reparación de estos autos, provocan que el consumidor adquiera nuevos modelos que en realidad sólo tienen ajustes cosméticos.
Electrónica de consumo. En este segmento los reproductores MP3 son el ejemplo más claro de obsolescencia planeada: por lo general no se puede actualizar en memoria, lo que obliga a comprar uno más poderoso cuando el usuario llega al limite en el anterior.
El Universal-Tech Bit
Lunes 2 de Mayo del 2011