"Ya es una realidad el ambiente donde los usuarios controlan todo desde sus teléfonos inteligentes”, dice Armando Sobrino López, experto en comunicaciones y subdirector de tecnología de TKM. Las aplicaciones son los “botones digitales” que posibilitan el manejo de distintas tareas. En el futuro, será más común controlar el nivel de luz, la televisión, lavadora, el refrigerador o aire acondicionado desde los dispositivos
móviles, asegura el experto.
Por ello, no es nada extraño que los fabricantes tecnológicos estén enfocados en crear aparatos con la característica de sincronizarse, a través de programas, con la tablet o el smartphone, como se mostró en la edición pasada del CES, la feria de tecnología de consumo más grande del mundo, el pasado enero.
Para todos los gustos
Usuarios de todo el mundo consideran que un dispositivo móvil es imprescindible para realizar sus actividades diarias, desde las más sencillas hasta algunas más complicadas.
Además del servicio de llamadas o de conexión a la red, tienen la posibilidad de descargar aplicaciones, las cuales se han convertido en los “básicos” tecnológicos.
“Se tienen apps particulares para casi todas las profesiones. Un doctor, por ejemplo, recibe en su teléfono inteligente los reportes de análisis de pacientes en tiempo real para lograr una valoración rápida de la enfermedad, además de que puede tener otro software que le permita saber con exactitud qué tipos de fármacos administrar en un tratamiento específico”, explica Sobrino López.
Para los que les gusta hacer ejercicio, existen programas que permiten conocer los signos vitales en el momento de realizar una actividades físicas, como correr o levantar pesas. Para los amantes de la literatura, las editoriales dedican gran parte de sus recursos a la digitalización de las publicaciones para que sean observadas en los dipositivos.
En el área educativa se tienen un sinfín de desarrollos como las calculadoras científicas que grafican funciones complejas o resuelven ecuaciones difíciles de hacer en papel.
Además, con los smartphones o tables, mediante aplicaciones específicas, los alumnos crean comunidades de estudio y las instituciones están en comunicación con sus inscritos para notificarles fechas de exámenes, calificaciones y simulacros de evacuación.
“Las apps han cambiado la forma de trabajo. Los desarrollos que han contribuido a que los usuarios estén siempre conectados son la mensajería instantánea, redes sociales y soluciones con capacidades de videollamada”, afirma.
Fiebre Digital
El más reciente reporte de Markets and Markets, empresa estadounidense que realiza estudios e investigaciones de mercado, afirma que en la actualidad existen más de 400 mil aplicaciones disponibles en la web para smartphones. Esta fiebre comenzó con la aparición del iPhone, en 2007, cuando a la par del lanzamiento del dispositivos móvil surgió la necesidad de tener un espacio digital donde los usuarios pudieran personalizar su smartphone. El crecimiento se dio en 2008, cuando Apple abrió las puertas a un nuevo
nicho de negocio: las aplicaciones móviles.
Con la App Store, millones de personas lograron encontrar programas que hacían al teléfono inteligente un aparato mucho más útil y robusto.
En ese momento, ya podían conectarse a Internet gracias a la tecnología inalámbrica Wi-Fi o mantenerse en contacto con su empresa desde cualquier parte del mundo.
En 2009, a un año de su creación, la tienda en línea ya registraba más de 2 mil millones de descargas, tanto libres como de paga; al finalizar el 2010, ya se hablaba de unas 9 mil millones de aplicaciones descargas.
Casi al terminar el primer mes de 2011, el 22 de enero, la empresa californiana comandada por Steve Jobs anunciaba que los usuarios ya habían descargado 10 billones de aplicaciones desde la App Store.
Rápido crecimiento
El mercado móvil se expande rápidamente. Para este año, el panorama no es distinto, ya que los fabricantes están ofreciendo la creación de mejores y más robustos dispositivos. Prueba de ello son los aparatos observados en el CES 2011. Los asistentes voltearon sus ojos hacia la nueva generación de tables, la mayoría equipadas con el sistema operativo Adroid, desarrollado por Google. Pero los desarrolladores de software saben que sus productos deben tener la característica de poder “correr” en cualquier plataforma: “Un programador toma en cuenta la actual gama de smartphones que existe en el mercado para crear aplicaciones, su objetivo es que cualquier usuario pueda tener la experiencia de utilizar y compartir cualquier aplicación”, asegura Sobrino López.
Las oportunidades se abren para los desarrolladores, quienes tendrán el reto de consolidar el ecosistema de aplicaciones móviles, al aprovechar las bondades que ofrecen las tecnologías celulares de tercera (3G)
—prácticamente en desarrollo en países latinoamericanos— y cuarta generación (4G) y la interactividad de la web 2.0.
De acuerdo con los datos de Markets and Markets, para el 2015 el mercado de las aplicaciones móviles alcanzará el valor de los 25 mil millones de dólares, cifra sobresaliente si se considera que en 2010 se cotizaba en poco más 6.8 mil millones de dólares.
Mar de oportunidades
La gran popularidad que alcanzó Apple con su tienda de aplicaciones, hizo que otros fabricantes cambiaran su percepción sobre los programas móviles. En la Actualidad, seis son las principales tiendas virtuales: App Store (creada en julio de 2008), Android Market (octubre de 2008), Software Store Palm (diciembre de 2008), App World Blackberry (abril de 2009), App Catalog Palm/HP (junio de 2009) y Windows Marketplace (octubre de 2009).El modelo de negocios establecido para los creadores de apps ha resultado atractivo; en promedio, el 70% del costo de la aplicación es para ellos y el resto para los gigantes tecnológicos.
Miguel Ángel Gómez, desarrollador de software, reconoce que el negocio de las aplicaciones es jugoso: “Alguien puede elaborar una app para encontrar el baño público más cercano; considerando que su valor en la tienda es de 50 centavos de dólar, y si en el primer mes es ‘bajada’ en mil ocasiones, el desarrollador tendrá un ingreso de 4 mil pesos mensuales. Si para el segundo mes es instalada por otros 5 mil usuarios, entonces tendrá una ganancia de 20 mil pesos mensuales”.
Los beneficios son tan atractivos, que cada vez más los operadores de telefonía han lanzado sus propias tiendas. Es un hecho, nadie se quiere quedar fuera
Fuente: El Universal-Tech Bit
Lunes 7 de febrero de 2011