Muchas escuelas deben tratar no sólo con los estudiantes que carecen de acceso a la tecnología, sino también con aquellos que tienen demasiado acceso. Algunos estudiantes pasan la mayor parte de su tiempo libre en casa jugando juegos de computadora, navegando por Internet, o enviando mensajes de texto en sus teléfonos celulares. Esta obsesión por el entretenimiento tecnológico se derrama en el ambiente escolar. Los maestros deben ser conscientes de los estudiantes que están jugando subrepticiamente juegos en teléfonos celulares o tabletas en el aula, que están utilizando el tiempo de la computadora de la escuela para comunicarse con los amigos, o que no están recibiendo el contacto social o ejercicio que necesitan porque están encorvados sobre su dispositivo En cada momento libre.
Otra dificultad es que la World Wide Web contiene no sólo información beneficiosa, sino también información que puede ser perjudicial. Los jóvenes pueden no tener las habilidades o el deseo de filtrar los elementos negativos de lo positivo. Como maestro, usted debe ser consciente de esto y debe hacer un esfuerzo para ayudar a los niños en las posibles áreas de peligro en Internet: salas de chat, trolls sexuales y así sucesivamente.
Así como usted como profesor debe hacer su investigación sobre la mejor manera de extraer beneficios de la tecnología, también debe hacer su tarea cuando se trata de estar preparado para combatir el impacto negativo que la tecnología puede tener. Asegúrese de que está equipado para manejar no sólo lo mejor, sino también lo peor de lo que sucede cuando la edad moderna llega a la escuela.